Buenos Aires, junio de 2015 – El plantel de Boca Juniors, en el marco de su Pretemporada, se encuentra en el IMG Academy de Sarasota, estado de Florida (EE.UU.), donde los científicos del Gatorade Sports Science Institute, en colaboración con el cuerpo médico y nutricional del club, realizaron una serie de evaluaciones para comprender cómo mejorar los aspectos relacionados a la nutrición e hidratación de todo el equipo.

Estas pruebas proporcionan información importante para optimizar el rendimiento físico y mental de los jugadores durante los períodos de competencia y de entrenamiento, buscando maximizar los resultados.

A través de estos estudios, los científicos analizaron diferentes variables de rendimiento como el consumo de energía en diferentes intensidades de esfuerzo. De esta manera, los especialistas del Gatorade Sports Science Institute y de Boca Juniors siguen la tendencia mundial hacia una personalización de la nutrición deportiva, incluyendo estrategias de control de la energía e hidratación individualizadas para ayudar a optimizar el rendimiento deportivo.

Entrenar en el fútbol de alto rendimiento actual, no solo consiste en desarrollar las capacidades físicas, gestuales o tácticas propias de este deporte, sino que está testeado científicamente que para alcanzar el clímax de rendimiento, variables como el consumo de energía, la hidratación, el descanso, la recuperación muscular, y las capacidades mentales tienen también una importante tasa de entrenabilidad que no puede ser descuidada.

Metodología de las pruebas

Análisis de la hidratación y el sudor

Una pequeña muestra de orina de cada jugador previa al entrenamiento, será sometida a un refractómetro digital, este dispositivo determinará si el futbolista llega bien hidratado o deshidratado, cada vez que este próximo a comenzar un entrenamiento o competencia.

Utilizando un parche colocado en el antebrazo, frente o el muslo, se recolecta una muestra de sudor con la cual los científicos determinan la concentración de electrolitos (sodio y potasio) que pierde un atleta en el sudor.

Según los resultados, los científicos del GSSI ofrecen recomendaciones estratégicas para el reabastecimiento de líquidos y electrolitos que pueden ayudar a los jugadores a prevenir calambres y la deshidratación, además de mantener y mejorar su performance tanto física como mental.

Análisis del consumo de combustibles

Para poder determinar el gasto de energía de los jugadores, cada uno de ellos completó un protocolo que ayuda para entender cómo su cuerpo utiliza la energía en cada entrenamiento o partido. Para esto, se midió tanto la cantidad de calorías que cada atleta usó como de dónde provenía la energía, ya sea de grasas y/o de carbohidratos.

Acerca del GSSI

El Instituto Gatorade de Ciencias del Deporte fue creado en 1988 para ayudar a las personas físicamente activas y deportistas a mejorar su salud y rendimiento a través de la investigación y educación permanente en ciencias de la nutrición e hidratación.

Para más información visite la página: www.gssiweb.org